La familia de M.T.G.M., la mujer de 33 años que fallecía el pasado día 12 en el Hospital Virgen del Mar de Almería durante el posparto, ha ampliado la denuncia interpuesta ante el Juzgado de Instrucción número 5 por una presunta negligencia médica tras el informe preliminar de la autopsia emitido por el Instituto de Medicina Legal en el que se revela que la muerte se produjo al menos una hora antes de que sus allegados recibiesen la noticia y después de solicitar información al equipo de facultativos que la atendió. Así lo confirmó a Europa Press el letrado y portavoz de la familia, Francisco Miguel Benete, quien detalló que los forenses han dictaminado que M.T.G.M. falleció por un shock hipovolémico a las 02,00 horas, tres horas después de su traslado a quirófano para contener una hemorragia posterior al alumbramiento, mientras no fue hasta pasadas las 03,00 horas cuando uno de los ginecólogos comunicó al marido y los padres el deceso mientras llevaban "una eternidad deambulando por el centro en busca de respuestas". Benete precisó, asimismo, que los datos aportados por los implicados en el caso apuntan a que la asistencia durante el puerperio "no fue correcta". En concreto, señaló que la mujer fue trasladada "directamente" a planta una vez dio a luz a su hija por decisión del matrón identificado como M.L.Z. al tiempo que un celador "al advertir que no se encontraba bien" le recomendaba su paso primero por la sala de reanimación. La ampliación de la denuncia que, según matizó, no se ha dirigido contra él ni contra los médicos G.M.G. y G.J.R.C. ni contra el Hospital Virgen del Mar sino que pide que se "depuren las posibles responsabilidades por esta muerte", recoge además que ante lo que tildó de "empeoramiento progresivo" de paciente se avisó "en más de una ocasión" a su ginecólogo por lo que "sospechamos –ahondó– que no estaba en el recinto". Añadió, en esta línea, que pese a que fue una hemorragia lo que derivó en una nueva intervención quirúrgica, no se practicó a M.T.G.M. transfusión de sangre alguna, por lo que "de nuevo intuimos que el centro no tenía reserva del tipo de la fallecida", si bien matizó que habrá que esperar a los resultados de las muestras remitidas al Instituto de Toxicología de Sevilla para completar el informe de autopsia. La demanda, a la que tuvo acceso Europa Press, ha sido interpuesta por el marido y el padre de la víctima, M.T.G.M., y en ella se solicita a la autoridad judicial el inicio de una investigación sobre la actuación del personal sanitario que atendió a la mujer al tiempo que urge la "práctica de la autopsia" para determinar las causas del deceso, del que podrían derivarse –continúa– "responsabilidades penales y civiles" para los ginecólogos G.M.G., G.J.R.C y el matrón M.G.Z. Según el relato de los hechos que acompaña a la denuncia, M.T.G.M. ingresó a las 11,00 horas de ayer en la planta de maternidad del centro hospitalario capitalino, de titularidad privada, para dar a luz tras un periodo de gestación "sin ningún problema". Después de conectar a a la paciente a un gotero, los sanitarios le administraron dos inyecciones epidurales entre las 13,30 y las 17,00 horas, momento en que se produjo un fallo en el catéter implantado en su espalda. Apenas dos horas y media después, la víctima alumbró a una niña y era trasladada de nuevo hasta planta donde comienza a sufrir "una grave hemorragia" que, en un principio, combaten con "medicamentos que se desconocen" hasta que comunican la necesidad de una nueva intervención quirúrgica ante la brusca bajada de la tensión arterial. La denuncia recoge, asimismo, según el relató del marido y padre de M.T.G.M., que desde las 23,00 horas, en que los facultativos informaron de que procedía extirpar la matriz para detener la pérdida de sangre, hasta las 03,00 horas de la madrugada de hoy, la "familia deambuló" por el Hospital Virgen del Mar sin noticia. Al hilo de esto, cita como uno de los médicos, al notificarles el fallecimiento por dos paradas cardiorrespiratorias que la paciente no había podido remontar en quirófano, les aseguró de forma textual: "se nos ha ido de las manos y no hemos podido hacer nada".