Diez presuntos implicados en la red dedicada al robo a mano armada de vehículos de alta gama que fue desarticulada en Almería en enero de 2007 enfrentan una petición fiscal que oscila entre los diez y los dos años de prisión en la vista oral que se inicia hoy ante la Sección Tercera de la Audiencia Provincial y que se prolongará hasta mañana. Fuentes judiciales informaron a Europa Press de que a los acusados, de nacionalidad española, marroquí y alemana y cuyas edades oscilan entre los 25 y los 47 años, se les imputa la comisión de delitos de robo con violencia e intimidación, falsificación de documento público y asociación ilícita. Al parecer, según las diligencias efectuadas por el Juzgado de Instrucción número 6 de la capital, la banda se organizaba pequeños grupos de cuatro personas a los que encargaban la interceptación de un vehículo que había sido seleccionado previamente. Primero, solían obstaculizar la vía para que no pudiese circular y a continuación, encañonaban con un arma de fuego al conductor y le obligaban a abandonar el turismo. Si éste se encontraba estacionado con sus ocupantes en el interior, los asaltantes también abordaban el coche. Una vez en su poder, los integrantes de la red sustituían las placas de matrícula de diferentes países, a los que enviaban los vehículos para, de ese modo, gestionar nueva documentación que les permitía rematricularlo en España. La operación del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Guardia Civil se saldó el 17 de enero de 2007 con la detención de 12 personas, de las que diez han sido acusadas. Los primeros arrestos, en los municipios de Benahadux, Campohermoso y la capital, permitió recuperar dos turismos 'Mercedes clase A' y un 'Opel Meriva'. En la segunda fase, desarrollada en Carboneras, Albox y la barriada capitalina de Retamar, se halló documentación que ayudó a desentrañar el 'modus operandi' de la organización y se localizaron un 'Porsche Cayenne', un 'Volkswagen Tuareg', un 'Audi A4' con matricula alemana, así como un cuarto turismo igual al anterior en proceso de rematriculación. Además de los coches sustraídos, los agentes intervinieron alrededor 200 placas, tampones de sellos oficiales de concesionarios de vehículos y de organismos oficiales relacionados con tramitación de documentación de vehículos, así como herramientas para la falsificación de números de bastidores, permisos de circulación en blanco y pegatinas trucadas para su colocación provisional en matrículas.