Miles de personas arroparon ayer con su presencia la útima de las procesiones de Semana Santa. El Resicitao procesionó durante más de dos horas por las calles de Almería, para encerrarse en la Iglesia de Santiago
La Misa estacional de El Domingo de Resurección terminó poco antes de las doce y media del mediodía, momento en el que en la Plaza de la Catedral había congregadas un buen número de personas que querían despedir con su presencia la Semana Santa.Tras la Levantá del Obispo, la imagen de El Resucitado inundó con su presencia la plaza. Abría el cortejo la Cruz de Guía con un sudario blanco, a la que seguían las representaciones de las distintas Cofradías con báculo y traje. Continuaba el cortejo procesional con la bandera corporativa, seguida por una docena de monaguillos que hacían sonar las campañillas.A hombros de 26 costaleros salía Jeús Resucitao, rodeado de claveles blancos en los laterales y jarras.El discurrir por el casco antiguo se realizó sin problemas, a pesar de la estrechez de algunas de sus calles. Eran las tres de la tarde, cuando la imagen llegó al tempo de Santiago. Un paso que puso el punto y final a la Semana Santa del 2010.