La delegación de costas ha sancionado a dos chiringuitos, ubicados en la playa de Rematar, por decorarlarlos con plantas y una zona verda a la entrada, para darles una mejor imagen.
La tregua declarada la pasada temporada estival a los chiringuitos hasta que no quede clara su situación de ilegalidad o no dentro del sector, parece que no ha sido del todo respetada. Al menos esos cuentan los propietarios de los chiringuitos Los Marisquitos y Mar Azul, que aseguran que la delegación de costas le ha impuesto 12.000 euros de multa, seis mil a cada uno, por “haber adecentado estos establecimientos y haber colocado una entrada mejor y unas plantas que le dan mayor viveza a la zona”.Están muy molestos porque las multas que les han impuesto no son por ejercer una actividad sin autorización, sino por acondicionar la zona de entrada a su establecimiento. Los propietarios de estos chiringuitos llevan instalados en ellos desde 1981 y explican que todos los años les multan sino por unas cosas, por otras. Una situación, aseguran, que si se suma a la de crisis actual, les impide poder trabajar con tranquilidad.