La pre-hermandad de El Resucitado, tras seis años de labor pastoral, desea que el obispo dicte el Decreto de elección canónica como Cofradía. La procesión partió a las 12.30 de la Catedral para iniciar su recorrido por las calles de la capital.
El Cristo de El Resucitado puso fin a la Semana Santa almeriense. El Resucitado recorrió las calles de la capital de una manera brillante en una jornada de lo más primaveral. Miles de almerienses estuvieron en las calles con la pre-hermandad de El Resucitado. La procesión partió a las doce y media de la Catedral y se encerró a las tres y media en su iglesia de Santiago. El trono de Alpaca llevaba una bella ornamentación floral a base de claveles e iris blancos, orquídeas amarillas y un frondoso jardín al pie de El Resucitado. Los 30 costaleros que calza el paso iban comandados por Juan Diego Linares, con Juan Castro y Víctor Pérez de contraguías. Medio centenar de nazarenos vestían túnica blanca inmaculada. Los hermanos mayores desfilaron con traje oscuro, guantes y su báculo. El acompañamiento musical corrió a cargo de la Banda de Música Virgen del Mar de Huércal. Era un ambiente soleado y veraniego, se notaba que era un día alegre, pero a su vez triste para los cofrades, alegre por la manifestación de la resurrección que sustenta la religión católica y triste porque la Semana Santa finaliza tras la última Cruz de guía.