El consistorio de la capital ha creado el Banco del Tiempo que permite intercambiar conocimientos o habilidades a personas que no tienen recursos.
Se imaginan un mundo en el que no hiciera falta el dinero y se pudiera subsistir intercambiando nuestros conocimientos o habilidades. Esa es la premisa de partida del Banco del Tiempo ideado por el Ayuntamiento de la capital. Una manera más de ayudar a los que no tienen recursos. Los interesados se podrán inscribir en un listado, pasarán una entrevista y ya podrán iniciar esta especie de trueque o cadena de favores. Una iniciativa que ya está en marcha y, de esta manera, cualquiera puede apuntarse a este banco de solidaridad. A partir de ahora, por lo tanto, podrá cambiar sus conocimientos por ejemplo de fontanería por clases de francés o inglés.