La crisis parece no perdonar ni a los clasicos del verano. Los chiringuitos, uno de los lugares favoritos de todos los turistas, han visto caer en picado sus ventas durante este verano
Cerveza bien fresquita, pescado del día, y con el incomparable marco del mar de fondo…Quien puede negarse a semejante placer.Pues parece que son cada vez más los que por necesidad han tenido que prescindir de estos placeres, y es que la falta de empleo y de dinero han dejado a los famosos chiringuitos casi sin clientela. O al Menos eso es lo que nos ha confesado el propietario de uno de los establecimientos más longevos de las playas del zapillo. Antonio Alonso, más conocido como Antonio el sevillano, mantiene abierto este emblemático local desde hace 53 años. Con los tiempos que corren, asegura que ha visto reducidos sus ingresos entre un 40 y un 50%, y lo peor no ha sido eso, sino que ha tenido que reducir drásticamente su plantilla.Aunque por tan solo un par de euros uno puede disfrutar de tapas de migas, carne a la brasa o de su especialidad, espeto a la brasa, combinándolo con su bebida favorita, lo cierto es que la crisis no perdona, aunque lo que cueste sea resistirse a ellos
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