Cientos de almerienses, gracias al buen tiempo y a la jornada festiva vivieron intensamente la tradición del Pendón. Por segundo año consecutivo Carlos Sánchez, fue el encargado de llevar el estandarte regio regalado por los Reyes Católicos.
En un día espectactular en lo climatológico y en una jornada festiva los almerienses disfrutaron de una de las tradiciones más solemnes de la capital, la del pendón, que simboliza la entrada de los Reyes Católicos en la ciudad, el 26 de diciembre de 1489. Desde uno de los balcones de la casa consistorial el Alcalde tras el juramento del concejal más joven de la corporación, Carlos Sánchez, cedía el estandarte regio. A partir de ahí comenzaba el recorrido hasta la Catedral, Sánchez perfectamente custodiado, con gesto serio y responsable.A las 11.30 y acompañado por los acordes del himno nacional, interpretado por la banda municipal, el portador del pendón y toda la comitiva entraban en la Catedral donde se celebraba la tradicional misa. En la homilía el obispo aprovechaba para pedirles a los feligreses que afianzaran su fe en un tiempo de peculiar incertidumbre. Una vez finalizada la misma, vuelta a la Plaza Vieja, allí el pendón era devuelto a la casa consistorial. El Alcalde lo recogía y lo tremolaba tres veces al grito de Almería por Andalucía, por España, por los Reyes Católicos y por la integración de los pueblos.Un acto en el que tomaron parte numerosas personalidades políticas y militares de la provincia. Así como parte de la corporación municipal con las habituales ausencias de los ediles de Izquierda Unida, a las que se sumaron algunos ediles socialistas que no siguieron en directo esta tradición del Péndón.