Taladros, motosierras, baterías o cualquier herramienta quer haya por el invernadero son susceptibles de ser robados, y es que durante las últimas semanas aprovechando el parón del verano ha habido numerosos robos en las explotaciones agrícolas de toda la provincia.
José Antonio tiene una explotación de una hectárea y media en la Cañada. Su producción es de tomates pera y nos cuenta como desde hace unas semanas no queda ni una sola herramienta en ella, ya que los amigos de lo ajeno, han aparecido hasta en tres ocasiones en este invernadero.Los trabajadores del campo han denunciado la falta de iluminación en los accesos a los invernaderos y la necesidad de que haya más patrullas de vigilancia.Entre los enseres robados José Antonio destaca una cocina así como una bomba de sulfatar, que le constará mas de 1.200 euros reponer. Sin duda alguna, una situación que esperan termine cuanto antes.