Los vecinos han protestado contra la actuación que el pasado fin de semana la ONG Greenpeace llevó a cabo en este enclave, al pintar la fachada del edificio de negro, bajo el lema “Hotel Ilegal”. Los vecinos han repitando la I, para declarar que se trata de una construcción legal, y pidiendo su apertura para generar empleo en el municipio.
La acción en defensa de la destrucción del Hotel del Algarrobico que desarrolló Greenpeace el pasado fin de semana ha vuelto a encender la mecha de la polémica sobre este enclave. En esta ocasión, un grupo de vecinos de Carboneras, molestos con la actuación de la ONG, han promovido a través de las redes sociales una protesta en defensa del hotel como vía para generar empleo y riqueza en la zona.Azata, la empresa promotora del hotel ha dado el consentimiento a los vecinos para realizar esta acción y muchos establecimientos de Carboneras han donado la pintura negra para repintar la fachada. Por su parte, los vecinos continuarán con las protestas y no descartan constituir una plataforma en defensa del hotel. Un edificio que, de momento, sigue siendo un punto negro en el litoral mediterráneo.