La rabia y la indignación por la muerte de Mari Carmen María sigue más que latente en el municipio de Berja. Los vecinos se han concentrado para unirse al dolor de la familia y exigir responsabilidades por lo ocurrido
Ha pasado más de una semana de la muerte de Mari Carmen Marín pero su pueblo, Berja, no olvida lo ocurrido. Unas cincuenta personas se concentraron en silencio en la plaza de la Constitución virgitana contra la injusticia.Se trataba de un acto convocado popularmente a través de las redes sociales y que no contó con la presencia de miembros de la familia de la fallecida. Mujeres, hombres y en definitiva vecinos se reunieron para denunciar lo ocurrido, exigir medidas y responsabilidades ante lo que consideran una negligencia.Éste no será el último acto de protesta en Berja por la muerte de Mari Carmen. La familia prepara una nueva convocatoria que recorrería las calles virgitanas.Una manifestación en protestas por lo sucedio, en apoyo a todas las víctimas de violencia de género y que podría desarrollarse el próximo 15 de agosto.
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