Un galardón que se ha hecho efectivo en la figura de su presidente, Antonio Sánchez de Amo, pero que supone un reconocimiento al trabajo realizado durante estos 40 años desde su creación.
El alcalde de Almería ha sido el encargado de entregar el escudo de oro a Verdiblanca tras sus cuarenta años al frente de las necesidades de las personas que más lo necesitan, los discapacitados.
Un reconocimiento a los 40 años de esta asociación que trabaja cada día por eliminar las barreras tanto físicas como psíquicas que se dan en la sociedad.
Lo que empezó hace 40 años como una iniciativa que algunos consideraron sorprendente, hoy es una realidad efectiva, que no sólo ha transformado y mejorado la vida de cientos de almerienses, sino que nos ha hecho a todos más solidarios.
El cuarenta aniversario de Verdiblanca merecía un reconocimiento especial, y desde el Ayuntamiento han querido entregarle la distinción más destacada que se puede otorgar, el escudo de oro de la ciudad.