Ahora les contamos la historia de Miguel, uno de los ‘peques’ de nuestra ciudad que estos días celebran su cumpleaños confinados. En su caso tuvo una gran sorpresa
El confinamiento también nos regala momentos inolvidables como el que vivió Miguel en su cuarto cumpleaños. Sus queridos bomberos llegaron hasta la ventana de su casa para darle la sorpresa de su vida.
Nunca había visto tan cerca esos uniformes y ese camión con el que tantas veces había soñado o jugado en casa.
El pasado año, por estas fechas, este pequeño luchaba contra la leucemia, por ello, sus padres habían preparado algo muy especial para este día que, por culpa de la cuarentena, se tuvo que suspender.
Rápidamente, contactaron con los Bomberos de Almería e idearon esta solución de urgencia. De esta manera, Miguel comprobó que los sueños a veces se hacen realidad. Felicidades!
