Un perfil de usuario que ha variado desde que el pasado 13 de marzo se decretara el estado de alarma ya que son muchas las personas que por primera vez y, por distintos motivos, se ven obligados a acudir a este centro en busca de un plato de comida.
Antes de las 12 del mediodía los fogones de la cocina del Comedor Social de La Milagrosa están a pleno rendimiento para comenzar a preparar el menú con el que se garantizará un plato de comida a aquellas personas que lo necesitan. Un perfil de usuario que ha variado desde que el pasado 13 de marzo se decretara el estado de alarma incrementándose de forma notable el número de usuarios que han pasado de los 90 habituales a los 140.
La crisis sanitaria, social y económica provocada por la COVID ha obligado a muchas personas a acudir a este comedor por primera vez.
Distintas historias, casos y situaciones familiares complejas que son escuchadas con gran cariño y delicadeza por las hijas de la Caridad.
Desde el Comedor Social de La Milagrosa hacen un llamamiento a la sociedad, conscientes de la solidaridad de los almerienses, para que colaboren y aporten su grano de arena con el que poder garantizar un plato de comida a todo aquel que lo necesite