El objetivo del equipo de Gobierno es minimizar los contagios por COVID.
Por lo pronto, se establece la obligatoriedad de reducir la presencia de los empleados públicos del Ayuntamiento que presten servicio en espacios comunes en, al menos, el 50%, en turnos de 14 días de duración en modalidad de trabajo no presencial. No obstante, este porcentaje se podrá ampliar a juicio de los responsables de las áreas y hacerla extensible a otros puestos que dispongan de zonas individuales de trabajo que puedan teletrabajar, siempre en turnos alternos y garantizando siempre la prestación de los servicios a los ciudadanos.Igualmente, todas las reuniones de trabajo se realizarán mediante videoconferencia y se procederá al cierre temporal de las oficinas periféricas de atención al ciudadano.
Entre las medidas adoptadas se establece que el personal de la unidad de la Policía Local pasará a prestar sus servicios de forma presencial con la jornada especial negociada y aprobada durante el periodo de confinamiento.
Además, se ha firmado una segunda instrucción con el objeto de suspender temporalmente los procesos selectivos en trámite hasta que la situación sanitaria mejore.