La campaña agrícola 2021-2022 acaba de dar su pistoletazo de salida y, como cada año, los agricultores denuncian la inseguridad derivada de la fluctuación de los precios. Ante esta situación, COAG propone cambiar el modelo de comercialización y cerrar contratos de venta antes del inicio de la campaña.
La campaña agrícola ha dado el pistoletazo de salida con malas expectativas para el cultivo de tomate, que sigue perdiendo superficie cultivada en beneficio de productos como el pimiento o el calabacín.
El motivo, según COAG, es la crisis constante que sufre el campo por el aumento de los costes de producción y las fluctuaciones de los precios de las frutas y hortalizas.
Para paliar la situación, COAG propone un cambio en el modelo de comercialización para que los agricultores cierren contratos de venta con las comercializadoras antes del inicio de la campaña.
De este modo, se podría planificar mejor la campaña y los agricultores no serían los únicos en soportar las crisis de precios. Un cambio que sigue la línea de la normativa europea y que la organización agraria espera que se vaya implantando poco a poco.