Miles de almerienses demostraron su estado de felicidad durante la Rúa de la UD. Almería por el centro de la ciudad. La comitiva rojiblanca realizó la visita institucional al edificio de alcaldía para entregar la Copa al alcalde Ramón Fernández-Pacheco y culminó la celebración con un lleno absoluto en la fiesta del estadio de los Juegos Mediterráneos
La UD. Almería ha vuelto a tener una cita con la historia en la celebración del tercer ascenso de su historia a Primera División después de un final de liga que no pudo ser más emocionante al decidirse en el último suspiro de la jornada 42 tras empatar a dos goles en Leganés con los goles de Rodrigo Ely y Sadiq Umar y que el Alcorcón le ganara al Éibar.
A punto de empezar la fiesta del ascenso con la salida de la Rúa estas fueron las primeras valoraciones de algunos de los jugadores de la UD. Almería.
Un autobús descapotable con los héroes del ascenso que partía a las 7 y media desde el estadio de los Juegos Mediterráneos para festejar por la ciudad con los todos los almerienses el feliz acontecimiento deportivo que ha supuesto 7 años después retornar a la Primera División del fútbol español.
La primera cita prevista de la comitiva rojiblanca estaba fijada en la protocolaria visita al edificio de alcaldía donde se celebraría el solemne ofrecimiento de la Copa de Campeones al alcalde de Almería Ramón Fernández Pacheco, que sería el primero en tomar la palabra expresando su agradecimiento y felicitación a los héroes del ascenso y transmitiéndoles la felicidad que le han proporcionado a todos los almerienses durante un acto en el que estuvieron representadas todas las instituciones y al que asistió la totalidad de la Corporación Municipal.
La Rúa de la Fiesta del Ascenso integrada el autobús descapotable, así como los autobuses de la prensa y de los familiares de los jugadores y cuerpo técnico, prosiguió el itinerario establecido por la principales arterias de la capital almeriense en dirección a la calle Gregorio Marañón y Obispo Orberá en cuyas aceras ya esperaban miles de almerienses con sus camisetas y bufandas rojiblancas, destacando sobremanera la innumerable presencia de los más jóvenes, niñas y niños de todas las edades, muchas de los cuales estaban cumpliendo el sueño de ver por primera vez y desde muy de cerca a sus grandes ídolos …
En la Puerta Purchena, como el centro neurálgico de la Ciudad de Almería la Rúa hizo una segunda parada para seguir festejándolo con la inmensa masa de seguidores que allí se habían concentrado antes de emprender a un ritmo mucho más lento el descenso del Paseo de Almería que lucía con un ambientazo espectacular produciéndose esa simbiosis entre la afición y los jugadores que con el propio ambiente musical que llevaban en el autobús no se refrenaron en la expresión de su desbordante alegría…
El momento culminante de la Rúa del ascenso se produjo cuando el autobús descapotable de la UD. Almería llegaba por fin a la Plaza de Las Velas donde ya no cabía ni un alfiler y donde ya esperaban varios miles de aficionados y aficionadas almerienses que no dudaron en disfrutar de otro momento histórico con una alegría tan irrefrenable como desbordante y donde además se vivieron los episodios más eufóricos de esta celebración con los cánticos de los jugadores en un espectacular baño de masas…..
Incluso desafiando al preciso y sincronizado dispositivo de seguridad de la policía local y nacional, la improvisación como si se tratara de una internada en el área del nigeriano Sadiq Umar que descendió con la Copa en la mano para celebrarlo con los demás jugadores sobre el propio asfalto al calor de los jubilosos y entusiasmados almerienses…
Sin duda fueron los momentos más fervorosos de la celebración en el epílogo de la fiesta en el centro de la ciudad antes de dirigirse hasta el estadio de los Juegos Mediterráneos, que con un lleno a rebosar pudo disfrutar del broche final de esta fiesta del ascenso a Primera División que ha sido la primera que han podido vivir los más jóvenes.
Una fiesta que se inició con la interpretación del himno por parte de su genuino autor, el guitarrista almeriense Gillermo Fernández y la intérprete sevillana Pilar Bogado, mujer por cierto de Alejandro Pozo.
Los protagonistas de la celebración fueron los jugadores de la UD. Almería que fueron saliendo al escenario situado en el mismo centro del terreno de juego dirigiéndose a los espectadores con diversos y festivos mensajes alusivos al ascenso a la máxima división…
Entre las más destacadas de las alocuciones destacó las del delantero nigeriano Sadiq Umar por hacerlo además en castellano…
El míster Joan Francesc Ferrer Rubi fue manteado por su plantilla de jugadores antes de dirigirse feliz a toda a afición después de esta extraordinaria temporada que nos ha brindado el equipo…
Y finalizó el director general del club Mohamed El Assy que quiso tener unas palabras de recuerdo para la figura de Turki Al-Sheikh, antes de que todo el equipo pusiera el broche al acto izando la Copa como campeones de Segunda División ante el fervor de todo el estadio.
La fiesta concluyó con el paseo de honor de la plantilla de jugadores y el cuerpo técnico sobre el impecable césped del estadio Mediterráneo y también con la entrada al campo de todos los familiares y demás empleados del club rojiblanco para inmortalizar con las fotos y los videos personales este inolvidable momento en la historia del fútbol almeriense, ocasión en la que pudimos conocer las impresiones de los grandes protagonistas.