Durante siglos esta tradición llega a todos los hogares, una costumbre que no se pierde y que llega a todos los rincones.
El Roscón de Reyes es una tradición que no solo no desaparece, sino que incluso crece y está sujeta a modas. Desde el roscón tradicional hasta los rellenos más sofisticados.
Los preferidos son los tradicionales y los de nata. Cada año solo en la Dulce Alianza se realizan más de mil roscones. Su preparación requiere días de trabajo pero no tiene secretos.
Entre los ingredientes el obligado agua de azahar. Y el rey y la haba, y la corona de algún rey mago. Un muestrario de roscones que ya adornan nuestras confiterías. Para la merienda de mañana o el desayunto del Día de Reyes: un roscón de los de toda la vida.