El segundo pleno del día, extraordinario y a petición de la oposición para hablar sobre la declaración de agua no apta para consumo humano en varias barriadas y diseminadas en la zona de Poniente de la capital.
La declaración de agua no apta para el consumo humano en las barriadas de Castell del Rey y La Joya es ahora mismo el caballo de batalla del Ayuntamiento. Hoy, pleno extraordinario, bronco y cargado de reproches. Desde el equipo de gobierno, aseguran que la gestión ha sido impecable, pues el suministro se canceló nada más detectarse un índice de radioactividad natural de 0,15.
Desde ese momento, la solución a corto plazo ha sido abastecer de agua potable a estas zonas, incluidas también las pedanías de El Palmer y Espejo del Mar, y el restaurante La Gruta, que pertenecen a Enix, con camiones cisterna. Sin embargo, PSOE y Podemos consideran que no se han dado todas las explicaciones necesarias.
La sesión se ha cerrado sin consenso entre los grupos, aunque desde el equipo de gobierno recuerdan que ya han tomado una solución a largo plazo ante un problema sobrevenido. Una tubería que conectará el depósito de San Cristóbal con El Palmer para abastecer a estas pedanías con el mismo suministro que el que tiene actualmente la capital. El problema en el suministro viene motivado porque estas zonas se abastecen de los Pozos de Bernal.