El recorrido tuvo lugar por las principales calles del centro
Una multitud de almerienses acompañaron a la Virgen del Mar en la procesión que se celebró ayer en honor a la patrona de de la ciudad. Con la música de la Banda Municipal de fondo, la lluvia de pétalos de flores y el olor a incienso, la semana grande de la capital finalizaba con un recorrido que llevó a la Virgen por algunas de las principales calles del centro, llegando a la Plaza Emilio Pérez, donde se vivió uno de los momentos más emotivos, cuando la patrona se situó frente al mar. El trono estaba vestido con nardos blancos y fue portado por un grupo de 68 horquilleros que fueron testigos de cómo los almerienses siguieron fielmente a su virgen en un paseo que puso fin a la Feria de Almería.