Anoche Pescadería volvió a iluminarse del fuego de las Candelas y del arte de este barrio histórico. El consistorio sigue luchando con éxito para recuperar una tradición casi perdida
Por tercer año consecutivo la luz de la candelas iluminó la Chanca y Pescadería. Una tradición que se había perdido pero que sabiamente ha recuperado y promovido el consistorio de la capital. Una velada de convivencia en la que en torno al fuego se puede disfrutar de baile, cante y mucho arte. Así se pudo disfrutar con las actuaciones de María la Rabota, Serafín el Barquero, el Joseles o los Primos Hermanos. Y por supuesto, con todo el folclore de cada vecino de esta barrio. El ayuntamiento, desarrolla esta iniciativa a través del Plan Urban en su afán de revitalizar el casco histórico.Una noche en la que no faltó el tradicional potaje gitano, condimento imprescindible en esta noche de las Candelas, y en la que también se reconoció la labor de las siervas de los Pobres y al que fuera gerente del Plan Urban, Luis Soria.
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