Más de un centenar de centros infantiles de la provincia podrían no abrir sus puertas el próximo tres de septiembre bajo convenio con la Junta de Andalucía.
Los impagos que la administración está cometiendo con estos centros desde el pasado mes de mayo está llevando a sus directoras a una situación límite, ya que aseguran no poder hacer frebte con tales gastos. Además denuncian la falta de solidaridad de otras administraciones, ya que a pesar de estar esperando a recibir los fondos, no se les permite ni un solo mes de retraso en sus pagos con la seguridad social o hacienda.Desde la Asociación de Centros Privados Conveniados afirman que probablemente tengan que privatizarse para poder asumir los gastos, con la consecuente disminución de alumnos y despido de empleados.Alrededor de 7.000 que disfrutan de estos centros conveniados podrían ver en peligro su educación a partir de septiembre