Una de las visitas obligadas, hoy último día del año, es a la tienda de petardos. Se trata de otra de las tradiciones de nochevieja para empezar enero con fuerza y ruido. Actividad frenética en los establecimientos especializados de la capital donde no han parado.
Una de las visitas obligadas, hoy último día del año, es a la tienda de petardos. Se trata de otra de las tradiciones de nochevieja para empezar enero con fuerza y ruido. Actividad frenética en los establecimientos especializados de la capital donde no han parado. Según nos cuentan lo que buscan los almerienses, variedad, barrenos, cohetes y bengalas, por cierto, en esto de la compra de productos pirotécnicos al parecer en la capital también mandan las mujeres.Por supuesto todos los productos que se venden en este tipo de establecimientos se venden atendiendo a las prohibiciones fijadas por la ley y solicitando el DNI. Lo que no cambia, sea quien sea el comprador, es la preferencia a la hora de buscar barrenos.Día y mes importante es estas tiendas ya que en diciembre, ni más ni menos, facturan alrededor del 80% de todo el años.
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