La leche frita, los roscos y los buñelos siguen siendo los preferidos por los almerienses
Son muchos los almerienses que estos días acuden a la Confitería Capri. Un tradicional establecimiento de la ciudad donde prima la calidad de los productos, todos ellos, elaborados de forma artesanal. Dulces típicos de Semana Santa entre los que no pueden faltar los pestiños, los rocos y los buñuelos y que suelen venderse en forma de surtido variado. El dueño de la pastelería, David Amate, asegura que a pesar de la actual situación económico, los almerienses hacen esfuerzos por dar un placer al paladar. En definitiva, se trata de delicias a las que muy pocos se pueden resistir y cuyas recetas para su elaboración se han ido transmitiendo de generación a generación entre las familias almerienses
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