Uno de los pilares de la horticultura sostenible es el control biológico de las plagas. Un método que comenzó en Almería y que se está extendiendo a los cultivos del bajo Guadalquivir.
El hotel Catedral ha acogido la Jornada técnica de Horticultura Sostenible de IFAPA.Una serie de conferencias que centran la horticultura sostenible como motor para una nueva economía y que pretenden transferir a los agricultores y a los empresarios del sector agroalimentario las investigaciones y adelantos que desde el instituto de investigación y formación agraria y pesquera se lleva realizando desde los años ochenta en cuanto a la lucha contra las plagas y a su control biológico.IFAPA apuesta por el sistema de implementación de enemigos naturales de las plagas para obtener productos más sanos y libres de productos químicos. Una forma de agricultura sostenible que comenzó en la provincia de Almería en los invernaderos y que ya se está haciendo extensible a cultivos al aire libre en la comarca del bajo Guadalquivir.