Miles de almerienses han acudido hasta la Catedral de Almería para profesar su fe al Cautivo, señor de Almería.
Un año más el Cristo de Medinaceli congrega a miles de fieles en la Catedral de Almería para participar en el besapiés, una tradición de la cuaresma en la que se profesa la fe al Cautivo.
Desde las 7 y media de la mañana el Señor de Almería recibe a todos aquellos que participan en este acto religioso. Entre los primeros en acudir han estado miembros de la Hermandad del Prendimiento que disfrutan de un día de gozo. El presidente de la Diputación de Almería junto a miembros de su equipo de gobierno también han querido rendir culto al Cristo de Medinaceli.
La tracición del besapiés se convierte en un bálsamo para miles de almerienses que encuentran esperanza y paz en su imagen. Se trata del culto de la cuaresma que más devotos congrega, un acto religioso que es antesala de la Semana Santa, la Semana grande de pasión para la que apenas quedan veinte días.
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