Antes de que lleguen las temidas olas de calor que nos abrasan cada verano, la Junta ya tiene en marcha un plan para prevenir los efectos de las altas temperaturas entre los colectivos más vulnerables: enfermos, ancianos y niños de corta edad.
Aunque los termómetros todavía no han subido demasiado para la época en la que nos encontramos, desde el 14 de mayo la Junta de Andalucía activa el Plan de Prevención de los Efectos de las Temperaturas Excesivas. Un programa que coordina a las consejerías de Salud, Presidencia, Igualdad e Interior para ofrecer una vigilancia especial sobre los grupos de riesgo.
También son colectivos vulnerables ante el calor excesivo los enfermos crónicos, quienes se medican con fármacos que puedan alterar la temperatura corporal y los niños menores de cuatro años. Como cada verano, hay unos consejos básicos para evitar golpes de calor.
Y lo más importante: mantener una alimentación saludable y ligera, en la que predominen frutas y verduras; y beber mucha agua durante todo el día, sin esperar a tener sed.