El entierro de la sardina, indultada por el viento, puso fin a uno de los carnavales más participati
El entierro de la sardina, indultada por el viento, puso fin a uno de los carnavales más participativos de los últimos años. Almería cerró unos festejos que han respondido a la apuesta del Área de Cultura, Educación y Tradiciones de sacarlos a la calle